¿No sabes quien es el muerto,
soldadito boliviano?
El muerto es el Che Guevara,
y era argentino y cubano...
Estas líneas no son puestas aquí por acaso, porque recientemente, el 9 de octubre hubo un aniversario de la muerte de un gran revolucionario y romántico. Ya son 40 años que no está con nosotros, pero hasta ahora continuamos encontrando en todas partes su nombre sonoro «Che», su retrato con la mirada combativa. ¿Por qué es tan famoso este muchacho que no ha vivido ni siquiera cuarenta años? ¿Cómo resultó que, habiendo nacido en Argentina el 14 de julio de 1928 y padeciendo el asma desde la edad de tres años, el pequeño Ernestito quedó conocido posteriormente como « un gran revolucionario cubano »? Supo superar la grave enfermedad y decidió llegar a ser médico. En la juventud con el amigo Alberto Granado salieron en un viaje de siete meses por América Latina, en que se encontraron cara a cara con la opresión de los pueblos indios y otras injusticias de la vida. Llevaba un diario, que posteriormente publicó con el nombre «Notas de viaje». Nada más regresar a casa en algunos meses aprendió 10 especialidades (la medicina legal, la alergología, la neurología...) para diplomarse de médico. Pero no puede estar tranquilo y sale para un viaje nuevo, pero ahora no se conforma con ser un simple observador, ansia luchar contra los opresores y defender a los oprimidos: "Aquí va un soldado de América!"
Durante el segundo viaje Ernesto se penetra con el espíritu de la revolución, habiendo sentido la presión de Estados Unidos en los países de América Latina. En Guatemala encuentra a la peruana Hilda Gadea, la partidaria ferviente de la revolución, con la que posteriormente se casa, al cabo de un tiempo ella da a luz una hija, de la que él dice: « Mi alma comunista jubila infinitamente: ¡la niña se parece a Mao Zedong!». En este tiempo recibe el apodo "Che" por la palabra, que siempre decía, y que es propia a todos los argentinos. Y al fin, en julio de 1955 en México Ernesto se encuentra con Fidel Castro. Como la consecuencia de este encuentro vendrá la victoria de los revolucionarios cubanos sobre la opresión del gobierno yancófilo de Batista. Al principio de la revolución Che toma parte simplemente como médico, pero el 3 de enero 1959 entra victoriosamente en La Habana a la cabeza de su tropa con el título de comandante. Pero con esto no acaba su actividad en Cuba.
El 9 de enero conforme un artículo de la constitución nueva, aceptado especialmente para él, Che Guevara es proclamado ciudadano cubano. Es un representante de Cuba, embajador para encargos especiales para el establecimiento de las relaciones económicas entre Cuba y otros estados, entabla conversaciones con los presidentes de Egipto, India, Indonesia, en Yugoslavia se encuentra con Tito, visita también Roma, Ceylán, Japón y Pakistán y desde luego los países del bloque socialista, China y la URSS. Además se hace director del Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA). Y luego inesperadamente para todos le nombran presidente del Banco Nacional, cuando a la pregunta de Fidel Castro: «¿hay aquí siquiera un economista?», al Che le pareció oír "comunista" y levantó la mano, después de aquel caso su firma hay sobre todos los billetes de banco. Por entonces su segunda esposa Zoila Rodríguez García, que el Сhe había conocido durante la revolución, alumbra para él cuatro niños más. Todos los de 6 años en el poder, el Che elabora e intenta realizar las concepciones económicas. Adelanta la idea del «hombre socialista nuevo», que vive en primer lugar para la sociedad, en vez de para sí. Lucha activamente contra el analfabetismo de la población. Pero por mucho que trata, la economía de Cuba sigue en la depresión, las esperanzas de ayuda de las repúblicas socialistas se han frustrado. En la Segunda conferencia económica afroasiática el Che Guevara pronuncia un informe crítico con la política exterior “egoísta” de la Unión Soviética. Para liberar Fidel de los reproches del políticos soviéticos, el Che renuncia a la ciudadanía cubana. <!--[endif]-->
El Che comprende que no tiene pasta para hombre de estado, y ve su verdadera vocación en la guerra de guerrillas, él es necesario allí, donde es necesaria la revolución contra el imperialismo. Por eso sale para el Congo Belga, donde recientemente han matado al luchador por la felicidad popular, Patricio Lumumba. Pasando casi un año en África, el Che no encuentra apoyo entre los habitantes del lugar. Pero su tentativa ha puesto una mina de acción retardada, que explotará después en Mozambique y Angola.
El luchador contra el imperialismo es todavía obsesionado con la idea de pegar fuego de una guerra liberadora en América Latina, sale para Bolivia, allí el Che se propone crear una escuela para los guerrilleros, que podrían llegar de los países limítrofes, y luego en todas partes encender la llama de la revolución.
Sin embargo aquí tampoco la actividad guerrillera de Che se vio coronada por el éxito, un traidor revela al ejército gubernamental el sitio de su base, comienza la observación de los insurrectos. Lo cual llevó a que el 8 de octubre de 1967 el comandante herido fuera capturado, siendo posteriormente destruido su grupo. De Washington al presidente de Bolivia Barrientos vino la orden de aniquilar al jefe de los insurrectos. La sentencia debió cumplirla el suboficial Mario Terán. Pero cuando vino a matarle, no se atrevió a disparar. En ese momento vio al Che grande, muy grande, enorme. Sus ojos brillaban intensamente. Y el Che le dijo: «¡Póngase sereno y apunte bien! ¡Va a matar a un hombre!»...
Ahora vemos que comandante Guevara ha vencido, América Latina ha conseguido la independencia. Y es imposible decir que el Che está muerto, porque el Che es más que un hombre, el Che es nuestro sueño de un futuro hermoso y justo, y él no morirá nunca, mientras baten los jóvenes corazones llenos de esperanzas y amor a la gente.
«Nos dejó su pensamiento revolucionario, nos dejó sus virtudes revolucionarias, nos dejó su carácter, su voluntad, su tenacidad, su espíritu de trabajo. En una palabra, ¡su ejemplo! Y el ejemplo del Che debe ser un modelo para nuestro pueblo, el ejemplo del Che debe ser modelo ideal para nuestros pueblos.» Fidel Castro Ruz (18 de Octubre de 1967)
Ana Bóndareva es estudiante del tercer curso en el centro de antropología social de Universidad Estatal Rusa de Humanidades. Se interesa por la lenguas y cultura de América Latina y Europa del Sur.
|