Es dudoso, que ayer en Rusia haya sido posible encontrar a un hincha, quien se atreva a decir, que la selección rusa entrará en el número de los participantes de la Eurocopa. Pero el cuento se convirtió en la realidad gracias a la selección croata, que ganó a la inglesa en un partido fantástico en Wembley. Simultáneamente, nuestra pobre selección no jugaba, sino que se atormentaba en el campo, intentando meter siquiera un gol en la puerta de Andorra. Una sola posibilidad que tenía nuestro equipo, se ha realizado, e irá a Austria y Suiza el verano siguiente.
Pero tras algunos minutos de alegría y admiración por la hazaña deportiva del equipo croata, volvió la razón y el pensamiento, que atormenta ahora a muchos hinchas en nuestro país: “¿Es que somos dignos de ir a Austria y Suiza? ¿Es que lo hemos merecido?”
La actitud general a este propósito la expresó muy exactamente un muchacho, conocido mío, que dijo “Por fin tenemos un equipo, del que podemos estar orgullosos. Es la selección croata”. En cuanto a mí, creo que nunca el triunfo de nuestra selección provocaba sentimientos tan contradictorios, como esta vez. Por un lado, estamos contentos de ver nuestra selección en Eurocopa, y por otro comprendemos, que no debería ir allá. El equipo, que no puede crear ni un momento para meter un gol en un partido en Zagreb, cuando los croatas ya están de vacaciones, no es digno de tomar parte en la Eurocopa. El equipo que no puede contraponer nada al israelí, cuando éste último ya ha perdido todo su motivo para jugar, no merece asistir a esta fiesta de fútbol.
Con esta opinión están de acuerdo hoy día muchos hinchas rusos. “Pero – les contestan los otros – si nosotros no somos dignos, ¿entonces quién?” ¿Los ingleses? ¿El equipo, que demostró su nivel sólo en dos partidos, que metió un solo gol en la puerta de Macedonia durante 180 minutos del juego? ¿El equipo, cuyos porteros tantas veces hicieron reírse al mundo entero de sus faltas? ¿La selección, cuyo técnico renunció a contestar a las preguntas de periodistas rusos tras la derrota en Moscú? No pienso, que lo hayan merecido más que nosotros. ¿Puede ser, los israelíes? Pero ellos perdieron todas sus posibilidades ya hace mucho...
Resulta que en nuestro grupo de clasificación había una sola selección, que tiene pleno derecho moral de participar en la Eurocopa: la croata. Pero el precioso segundo puesto lo ha ocupado la nuestra, y a pesar de todo, es ella que va a Austria y Suiza.
Sin ninguna duda, esto es una victoria. Y ante todo, la han merecido los hinchas rusos, que apoyaban su selección en todas las circunstancias, a pesar de las derrotas y el juego descolorido. La magnífica victoria sobre Inglaterra, que nos abrió la puerta en la Eurocopa, fue en gran medida su mérito. El técnico de la selección Guus Hiddinc no menos ha merecido ir a Austria y Suiza. ¡Que se diga que todos sus éxitos no son más que la suerte! Sin la suerte no sería posible ningún triunfo en el gran deporte. ¿Pero quién se atreverá a negar, que Hiddinc ha podido cambiar todo el ambiente en el equipo nacional, que con el técnico holandés la selección empezó a demostrar un juego más rápido, más atractivo, y por fin, más moderno? Las faltas, sobre todo en la defensa, son muchísimas, y con los futbolistas del nivel tan bajo es imposible corregirlas todas. Sin embargo, se ve bien el trabajo de Hiddinc, su celo y su insistencia, y su objetivo principal, el hacer de la selección rusa un verdadero equipo europeo.
Según el juicio de la mayoría de los hinchas rusos, los menos dignos de participar en Eurocopa son los futbolistas. Por lo visto, lo comprenden bien. No en vano al volver de Andorra en el aeropuerto pasaron de largo de los periodistas sin ninguna palabra, y nadie advirtió la alegría en sus caras. Comprenden bien, que fracasaron en Israel y no fueron dignos de entrar en la Eurocopa. Pero es imposible acusarlos de falta de ganas. Por eso, cuando jugaban en Andorra todos sus pensamientos eran en Wembley, donde la selección croata hacía milagros en el partido contra Inglaterra. Por eso casi volvieron a fracasar y todo el segundo tiempo rechazaban los ataques de los futbolistas andorranos. ¡Quién pudiera imaginarlo hace veinte años!
Pero a pesar de todo el presidente de la UFR Vitali Mutko sigue asegurándonos, que tenemos un equipo muy joven y talentoso, que es capaz de mucho. No lo veo, como la mayoría de los hinchas. No veo que los clubes europeos se interesen por los jugadores de nuestra selección, excepto Akinfeev, Zhirkov y Pavliuchenko. Esto es la muestra más impresionante del nivel de los futbolistas rusos. Desde luego, esperaremos que la Eurocopa no pase en vano para ellos y que al entrar allí por la puerta de servicio, salga por la puerta grande.
Y mientras tanto, tenemos que tomar el ejemplo de Croacia. Este equipo magnífico salió al campo de Wembley sólo para apoyar el prestigio de su país, como dijo su técnico Slaven Bilić. Su delantero Ivica Olić, que pasó en nuestro país unos años de su carrera, ya dijo, que luchaba en este juego por Rusia, y fue el mejor en este partido. No creíamos, que la selección croata aplicase todas sus fuerzas para ganar a Inglaterra, y algunos emprendedores rusos ya propusieron una recompensa a los mejores jugadores croatas, si triunfaban contra los ingleses. Pero tras el juego rechazaron este premio, al decir que jugaban sólo por su honor. ¡¿Será que tendremos algún día tal selección?! No pienso...
Yuri Shíjov es estudiante del segundo curso de la Universidad Lomonósov de Moscú. Se interesa por la historia moderna y la vida política de los países europeos y los del Oriente Próximo. En el tiempo libre es un turista aficionado y un hincha y jugador de fútbol y hockey sobre patines.
