Cuando pasaba mis vacaciones en Madrid, en primer lugar decidí visitar el corazón del fútbol de la capital de España – el estadio Santiago Bernabéu, la arena del Real Madrid. El legendario estadio es un valor para cada hincha por sí mismo incluso sin los matches que juega allí el Real una vez cada dos semanas.

Examinado el estadio por afuera y convenido a las cajas, descubrimos una inscripción “Tour Bernabéu”. Resultó que por 15 euro podemos visitar el estadio y pasear por él sin un grupo de excursión lo que es muy conveniente. Comprando las entradas subimos a la parte más superior de la arena en un ascensor y nos encontramos en la cima de una tribuna, en un lugar que es un mirador original y de donde se abre todo el estadio. Habiendo gozado del panorama, fuimos a la Exposición de Trofeos, donde se presenta la mayoría de las copas, que el “club real” ha ganado. Los tornasoles de centenas de copas que Real ha ganado en su historia más que centenaria sorprenden la imaginación.

Después bajamos casi al calvero y de allá fuimos al Palco de honor, donde están todas las Copas de Europa, las Copas de UEFA ganados por el Real y también los premios de los jugadores del Madrid (las “Pelotas de oro”, las “Botas de oro”, etc.). De allí bajamos directamente al calvero con la posibilidad de convenir al banco de recambio, sentarnos en el lugar del entrenador y después bajar al local debajo de las tribunas y visitar los guardarropas de los equipos. ¡Es una fiesta para hincha! Luego entramos en la Sala de conferencias de prensa y fuimos al fin a la tienda especializada del Real, de tres pisos, donde compramos los recuerdos para memoria.