La organizadora del evento prof.a Catalina Samsónkina comentó al ¿Qué pasa?:

  “Este encuentro supuso nuestra primera experiencia en la organización de una actividad musical dentro de un espacio académico que, desde el punto de vista técnico, no está acondicionado para que se lleven a cabo en él conciertos u otras actividades relacionadas con la música sino conferencias científicas. Por eso encontramos ciertas dificultades: en el escenario no se oía la música, así que los bailarines se vieron obligados a bailar sin escuchar la música y los músicos, a tocar "de memoria" y estableciendo contacto visual, ya que no se oían entre sí. Con todo, la ejecución fue de maravilla y nosotros aprendimos una buena lección en cuanto a organizar una fiesta musical en la MGU.

  Otro problema fue el de seguir y respetar el protocolo en la comunicación con los diplomáticos, ya que en este día de fiesta logramos reunir a los representantes de seis embajadas latinoamericanas: Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Cuba y México. Teníamos miedo de ofender a alguien por el orden de los países anunciados desde el escenario o por el tamaño y posición de las banderas nacionales que adornaban las paredes del aula.