TRES DÍAS CAMINANDO POR RUSIA: ENTREVISTA CON BRONTIS JODOROWSKY
¿Qué Pasa?: ¿Cuándo empezó Ud. a pensar de ser un artista?
BJ: Empecé a actuar cuando tenía 6 años en “El Topo”, con mi padre, y luego hice otras tres películas en America Latina con otros directores. Con una de ellas gané un premio al “mejor actor infantil en México” en el año 1974. Después, por los viajes, dejé de pensar en la interpretación hasta los 20 años. A los 20 años de edad acompañé a unos amigos a su clase de teatro, y todo sucedió de una manera muy extraña. Hubo un alumno que no fue y el profesor me preguntó si queríareemplazarlo, pero sólo para esa clase. Y allí empecé a educarme, porque en aquella época yo era un ignorante en todo lo relacionado con el teatro. De esta forma empecé mi formación a los 20 años: yo quería desarrollarme como ser humano a través del ridículo de teatro.
¿QP?: Brontis, para Ud. ¿un actor de cine y teatro son dos cosas distintas?
BJ: Si, un actor de cine y de teatro son dos cosas muy distintas. Yo creo que tener una experiencia en el teatro es algo fundamental. Luego puedes aprender a trabajar con la cámara, etc. En el teatro, el actor es lo central, mientras que en el cine el actor no lo es. El cine es un arte técnico, y allí hay que manejar el montaje, la música, la iluminación, la escritura del guión… Si tienes un buen actor del cine, esto te dará 30% de éxito de la película.Con un mal actor se puede hacer una excelente película, si uno sabe manejar la técnica. Con un mal actor no puede haber una buena obra de teatro. Un trabajo en teatro es siempre un trabajo en equipo, nunca es un trabajo individual. Eso es lo que me gusta del teatro.
¿QP?: Ser actor es muy difícil. ¿Nunca Ud. ha pensado cambiar su profesión?
BJ: Si, claro. Uno consigue una gran compensación por su trabajo, por su sacrificio, pero es una vida muy dura. Después de experimentar en ciertas obras, me volví más exigente, y pensé en dejar el teatro, porque creía que ya no podía improvisar más. En el arte, cuando no se progresa, hay que parar. Yo he tenido más de una crisis y, felizmente, en esos momentos he tenido encuentros con directores que me han hecho ver el teatro de una manera nueva y diferente. Ahora siento que tengo mucho que aprender en el teatro, y mucho que progresar. Yo lo sigo practicando con mucha pasión.
¿QP?: La fama de su padre, ¿le molesta o le ayuda en su carrera artística?
BJ: Yo siempre he vivido con el hecho de tener un padre conocido. Por una parte me ha pesado, me ha dado vergüenza, pero por otra me ha ayudado.Para un hombre no realizado, frustrado por su vida, ser hijo de alguien anónimo te ayuda, porque tienes que realizarte tú mismo. Últimamente trabajamos juntos, y claro, hablamos sobre nuestros proyectos comunes. Le cuento lo que estoy pasando, lo que hago, pero no le pido ni ayuda ni consejos. Él ya sabe que tengo mi vida artística y la respeta. Por eso le gusta trabajar conmigo, porque me tiene respeto.
¿QP?: ¿Ud.escucha los consejos de su padre?
BJ: Alejandro viene a ver mis obras, y en general le gusta mucho mi trabajo. Él dice que le encanta trabajar conmigo, que soy un actor con quien siempre ha soñado, y él tambiénes un director muy experto.Alejandro puede hacer comentarios, y a veces estoy de acuerdo y a veces no, pero somos artistas adultos. Su opinión me interesa, pero no es algo que me hace ni dudar, ni cambiar nada. El trabajo en teatro es un trabajo en equipo, entonces, para los actores, escuchar los consejos del exterior es perder la obra. Aunque sus consejos sean inteligentes, pueden estropear la obra. La obra es lo que es, y cada obra tiene sus momentos buenos. En general, no es sano escuchar los consejos del exterior.
¿QP?: ¿Cuál es la diferencia entre el teatro europeo y teatro latinoamericano?
BJ: El teatro es algo, que se hace aquí y ahora, absolutamente independiente de un lugar. Es imposible hablar sobre la diferencia entre el teatro europeo y latinoamericano.Además, el teatro europeo no existe. Hay muchos teatros europeos distintos, hay muchas escuelas distintas, muchas compañías distintas, y todos están buscando lo que es el teatro. El teatro latinoamericano tampoco existe. America Latina, desde la frontera con los EEUU hasta Chile - es un continente con pueblos distintos y búsquedas artísticas muy diversas. La gran diversidad de caminos es lo que crea la riqueza artística de un país.
Pienso que toda generalización es casi un crimen contra la humanidad, todos somos diversos.
¿QP?: Brontis, Ud. tiene un nombre griego y es de origen judío-ucraniano, nació en México y vive en Francia. ¿Esta mezcla tiene alguna influencia en su vida?
BJ: Claro, absolutamente. Por mi madre soy francés, puro francés hasta Enrique IV por lo menos. Mi familia francesa está totalmente enraizada en Francia. Mi padre viene de una familia que no ha dejado de emigrar. Me siento como un tronco entre esas dos cosas, he nacido por el canto de las estrellas y por el agua de la tierra.
Un actor tiene que viajar y ver muchos países. Tiene que ser una persona curiosa y aumentar tu experiencia vital. Un actor es siempre un canal a través de que pasan las pasiones de los personajes, el texto. Cuanto más abierto sea uno, más se enriquece.
¿QP?: ¿Qué impresión tiene sobre Rusia?
BJ: Yo siempre quise venir a Rusia. Pero ¿saben Uds que era mi primera impresión? Que los rusos caminan mucho. Durante estos días he caminado tanto, que nunca he hecho en mi vida, aquí la vida y la gente te hacen hacer 100 metros más. Segun yo es justo: hay que caminar mucho para conocer de verdad este país muy grande y interesante donde se encuentran tantas culturas. Entonces la próxima vez voy a comprarme otros zapatos, más cómodos...
Ana Voronkova es estudiante
postgraduadade la Facultad de Filología de la MGU
Este artículo está preparado con el apoyo de Mario Pardo y Katerina Samsónkina