El cómic tiene un gran valor como expresión cultural, por
su lenguaje regional y coloquial, sus personajes favoritos, los temas que
tratan y las realidades que describen. Las historietas en México reciben el
nombre de "monitos". La etapa de oro de los monitos mexicanos fue en
la década de los cuarenta, cuando sale la revista Pepín. Gabriel
Vargas (1918) y Butzé publicaron en ella «La Familia Burrón», un clásico de la
historieta mexicana, creada en 1948 y que continúa publicándose. Este libro de
"monitos" trata de las aventuras de una familia típica de clase baja
de la Ciudad de México, ubicada en el "Callejón del Cuajo Número Chorrocientos
chochenta y chocho".
La Familia Burrón (viene de palabra «burro») presenta una
consistente crítica, en clave de humor, sobre la sociedad actual mexicana y sus
cualidades, “la realidad nacional”. La Familia Burrón, comparte algunas características
con otra famosa familia dibujada: los Simpson.Otro de los historietistas más reconocidos de México
es Rius (1934). Inició su carrera en 1954 en la revista Ja-Já y desde entonces ha colaborado en los principales diarios
y revistas de México. Es el autor de dos historietas muy populares: «Los
Supermachos» y «Los agachados». Los dibujos de Rius convirtieron la caricatura
en un arte didáctico, muy creativo y sobre todo muy mexicano. Es autor
de más de cien libros y ha ganado docenas de premios nacionales
e internacionales. Rius es uno de los grandes educadores del México del siglo XX,
ha publicado libros sobre temas de historia, medicina popular y filosofía, con propósitos
de divulgación e ilustrados con sus propias caricaturas: «Filosofía para Principiantes»,
«Marx para Principiantes», «Cuba para principiantes». Rius ha expresado abiertamente
su experiencia con la censura mexicana, en donde el credo de la prensa había
sido no meterse con la Virgen de Guadalupe, con el ejército ni con el
presidente. Definitivamente hemos recorrido un largo camino desde entonces. Y
esto en parte gracias a los moneros mexicanos. En el mundo del cómic siempre hubo
más autores-hombres. Yolanda Vargas Dulché es un
buen ejemplo de mujerhistorietista. Ella es la autora del
popular «Memín Pinguín», sobre un "chiquitín (pequeño – A.V.) negrito de
enormes ojos y muy chistoso". Para diseñar el aspecto físico de Memín,
Doña Yolanda tomó como modelo los niños cubanos que había conocido en un viaje
a la isla. Memín Pinguín fue dibujado por el maestro Sixto Valencia.
La Historieta de Memín Pinguín trata sobre las aventuras
de Memín, un negrito simpático, estudiante de tercero de primaria, y sus
entrañables compañeros Ernestillo, Carlangas y Ricardo. Memín tiene una
sinceridad conmovedora y un alma sin dobleces pero también es malicioso y hasta
tramposo. Tiene una terrible facilidad para provocar enredos, a los que arrastra
a sus amigos. Los valores de amistad y familiares sobresalen en cada página y
es de las pocas revistas que manejan el lenguaje "popular" mexicano
en su forma más limpia. Los personajes de doña Yolanda están inspirados por personas
reales que ella había conocido: su novio, que más tarde sería su esposo, y
todos aquellos amigos suyos de la primaria en la colonia Guerrero,
quienes se convirtieron en los compañeros de andanzas y aventuras
del simpático negrito. El dibujante mexicano Manuel Moro Cid con el guionista
mas famoso chileno Alejandro Jodorowsky crea el primer Ciborg de la historia en
los cómics, la serie «Aníbal 5» (1966). Esta historieta se parece más que otras
a las historietas norteamericanas, con un «superheroe». Al protagonista los
mexicanos le concedieron el título de «el más grandioso de los cómics
mexicanos». El androide más sexual de todos los tiempos fue un escándalo. A
propósito, Alejandro Jodorowsky ahora viene a Moscú los 8-9 de Octubre y dará
una charla en la embajada de Chile. Todos los interesados pueden comprobar los
anuncios en la comunidad on-line de QP en www.vkontakte.ru. El último, que al
principio me chocó y de quien quiero escribir hoy, es Trino (1961), un caricaturista
de Guadalajara, más joven y más ¿rebelde? en muchos sentidos. Los personajes
hablan de las drogas, el sexo y la escatalogía, utilizando las palabras que
sabe cada mexicano pero que uno nunca encuentra en el diccionario. Entre sus
personajes o tiras se encuentran: «Fábulas de Policías y Ladrones» y «El Santos
contra la Tetona Mendoza». «El Santos» — es la historieta más rebelde de todas.
El Santos es un luchador, un tipo enmascarado que combate las amenazas de la
humanidad. Aunque no tiene poder ni valor alguno, junto con su ayudante (El
Cabo) luchan contra sus enemigos. Cada una de estas historietas está dotada de
un humor incalculable. Este personaje, aunque es una persona estereotipada como
el
mal mexicano, puede conquistar el corazón de mucha gente
con su famoso inicio: Estaba un día el Santos… La “Tetona” (viene de palabra «tetas»)
fue la esposa del Santos durante un tiempo. La Tetona antes era la Nena Mendoza
pero fue secuestrada y luego fue prostituta aunque abrió un burdel después de
ser luchadora (el "Tetona's palace"). El diablo Zepeda es el personaje
más sentimental de todos, aunque sólo llora ante el encargado de limpiarle la
nariz. Por último, el Cabo es el personaje más fiel al Santos y en la mayoría
de los capítulos lo acompaña. El Santos habla como hablan en Guadalajara, no
como en México D.F. Por ejemplo, el dice “chéntatelo” en lugar de “chíngatelo”;
“ocupo”, en lugar de “necesito”, así como toda otra serie de modismos. Trino
fue galardonado con el premio Pagés Llergó al mejor caricaturista del año 2006.
El cómic es, en realidad un medio de comunicación y al mismo
tiempo una expresión artística distinta a otras como la pintura o la
literatura, ante las cuales ha sido contrapuesta, como la “literatura barata”. Espero
que el mundo del cómic se abra para ustedes como se abrió un día para mí.
Ana Voronkova es Coordinadora del departamento iberoamericano
del festival internacional del cómic «KomMissia», la facultad de Filología de
la MGU
Hola, nos parec muy interesante su comentario, ojalá pudiéramos intercambiar información, le dejo mi correo o si gusta puede ubicarnos en contacto@culturacomic.com